Björk Volta Tour en Bogotá

Que buena razón para escribir en mi descuidado blog, ha pasado tanto tiempo desde mi ultima entrada, tanto por contar, tantos momentos vividos, pero solo Björk me ha inspirado para escribir este corto review del concierto que dio anoche en Bogotá.

Para comenzar, algunas de las razones por las que no he vuelto a escribir se traducen a que he estado dedicado al desarrollo de mi parte artística, nuevamente tengo obligaciones laborales y pronto tendré mi primera exposición colectiva en una reconocida galería de la ciudad.

El Palacio de los Deportes fue el escenario seleccionado para el concierto, que finalmente termino con lleno total y el unísono de miles de fanáticos que coreábamos las canciones de esta maravilla Islandesa.

El escenario escuetamente adornado con algunas banderas con ilustraciones de animales y de anatomía humana, me hizo recordar las antiguas cartillas de biología de los colegios, no obstante debo reconocer que soy un amante de este tipo de gráficas.

Luego de una larga espera con una música tradicional oriental, aparecen en el escenario las Wonder Brass y luego al fondo Björk, las trompetas suenan y Earth Intruders es la canción que abre el concierto, todo el palacio canta y baila alegremente la canción, mientras la Reina del Electro pop Islandés se mueve por el escenario, vestida con unos tejidos en crochet elaborados por artesanos del Icelandic love Corporation. Luego poco a poco el espectáculo se va desarrollando y observo cada uno de sus movimientos en el escenario, era increíble verla en vivo y en directo, manteniendo una constante conexión con su música, su voz, su mágico encanto que seduce todo el escenario.

Para mi el momento más especial fue cuando cantó Cocoon de su álbum Vespertine, fue para mi el mejor regalo de la noche, amo la letra de esa canción que para mi representa un poema sonoro compuesto al “chico” que puede colmar el espacio de mi corazón. Creo que la letra es más que directa hacia lo que hago referencia.

Luego de un repertorio que se mezcló con lo mejor de sus álbums Debut, Post, Homogenic, Medúlla y Volta. Björk y su banda se ausentan temporalmente para un pequeño descanso y luego reaparece de la oscuridad finalizando con The Anchor Song y el encore de Declare Independence. Se despidió con la bandera Colombiana en su cabeza y una lluvia de papelitos blancos que posaron sobre las cabezas de los asistentes y el piso del Palacio.

Fue emocionante escucharla decir repetidamente “Gracias” “Muchas Gracias”, mejor aun observar sus bailes en el escenario la energía que nos entregó a todos los admiradores de su música. Realmente espectáculos como estos son los que se graban en la memoria y permanecen en el recuerdo colectivo.

Hasta la próxima y espero no tardar tanto tiempo en escribir.